martes, 27 de agosto de 2013

AMADO PADRE MÍO







AMADO PADRE MÍO, QUE VES MIS NECESIDADES, TE OFREZCO EL CUERPO AMADO DE TU HIJO, EN LA HORA DEL GRAN DESAMPARO, LAS TRES DE LA TARDE. SUFRIENTE, ABANDONADO Y HUMILLADO, MURIENDO POR MI, QUE NO LE MEREZCO, TE LO OFREZCO PADRE MÍO, POR TODO LO QUE ME AFLIGE, QUIERO SENTIR TU MANO PROTECTORA QUE ME ALIVIE A MÍ Y MI FAMILIA, LA PAZ DEL MUNDO Y MI PAÍS, PADRE BUENO, QUE TANTO NOS AMAS AL DARNOS A TU HIJO,  TE LO PIDO, NO ME DESAMPARES, PERDONA TODOS MIS PECADOS COMETIDOS DE TODA MI VIDA, QUE TANTO TE HAN OFENDIDO, Y LLÉVAME A TU REGAZO COMO UNA PEQUEÑEZ QUE SOY,  TE LO SUPLICO POR NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO QUE VIVE Y REINA CONTIGO Y EL ESPÍRITU SANTO.