NUESTRA SEÑORA DE LAS TRES AVEMARÍAS

NUESTRA SEÑORA DE LAS TRES AVEMARÍAS
Modo de practicar esta devoción: Todos los días, rezar lo siguiente: ¡María, Madre mía; líbrame de caer en pecado mortal! 1- Por el Poder que te concedió el Padre Eterno. (rezar un Avemaría) 2- Por la Sabiduría que te concedió el Hijo. (rezar un Avemaría) 3- Por el Amor que te concedió el Espíritu Santo. (rezar un Avemaría) Fue la misma Santísima Virgen la que dijo a Santa Gertrudis que "quien la venerase en su relación con la Beatísima Trinidad, experimentaría el poder que le ha comunicado la Omnipotencia del Padre como Madre de Dios; admiraría los ingeniosos medios que le inspira la sabiduría del Hijo para la salvación de los hombres, y contemplaría la ardiente caridad encendida en su corazón por el Espíritu Santo". Refiriéndose a todo aquel que la haya invocado diariamente conmemorando el poder, la sabiduría y el amor que le fueron comunicados por la Augusta Trinidad, dijo María a Santa Gertrudis que, "a la hora de su muerte me mostraré a él con el brillo de una belleza tan grande, que mi vista le consolará y le comunicará las alegrías celestiales".

miércoles, 16 de octubre de 2013

SALMO 90, SALMO PROTECTOR






SALMO  PROTECTOR

SALMO 90

TÚ QUE HABITAS AL AMPARO DEL ALTÍSIMO
Y RESIDES A LA SOMBRA DEL OMNIPOTENTE,
DILE AL SEÑOR: “MI AMPARO, MI REFUGIO,
MI DIOS, EN QUIEN YO PONGO MI CONFIANZA”.

EL TE LIBRARÁ DEL LAZO DEL CAZADOR
Y DEL AZOTE DE LA DESGRACIA;
TE CUBRIRÁ CON SUS PLUMAS
Y HALLARÁS BAJO SUS ALAS UN REFUGIO.

NO TEMERÁS LOS MIEDOS DE LA NOCHE
NI LA FLECHA DISPARADA DE DIA,
NI LA PESTE QUE AVANZA EN LAS TINIEBLAS,
NI LA PLAGA QUE AZOTA A PLENO SOL.

AUNQUE CAIGAN MIL HOMBRES A TU LADO
Y DIEZ MIL, A TU DERECHA,
TU ESTARÁS FUERA DE PELIGRO:
SU LEALTAD SERA TU ESCUDO Y ARMADURA.

BASTA QUE MIRES CON TUS OJOS
Y VERAS COMO SE LE PAGA AL IMPÍO.
PERO TU DICES: “MI AMPARO ES EL SEÑOR”,
TU HAS HECHO DEL ALTÍSIMO TU ASILO.

LA DESGRACIA NO TE ALCANZARÁ
NI LA PLAGA SE ACERCARÁ A TU TIENDA:
PUES A LOS ÁNGELES LES HA ORDENADO
QUE TE ESCOLTEN EN TODOS TUS CAMINOS.

EN SUS MANOS TE HABRÁN DE SOSTENER
PARA QUE NO TROPIEZE TU PIE EN ALGUNA PIEDRA;
ANDARÁS SOBRE VÍBORAS Y LEONES
Y PISARÁS CACHORROS Y DRAGONES.

“PUES A MI SE ACOGIÓ, LO LIBRARÉ,
LO PROTEGERÉ, PUES MI NOMBRE CONOCIÓ.
SI ME INVOCA, YO LE RESPONDERÉ,
Y EN LA ANGUSTIA ESTARÉ JUNTO A ÉL,
LO SALVARÉ, LE RENDIRÉ HONORES.
ALARGARÉ SUS DÍAS COMO LO DESEA
Y HARÉ QUE PUEDA VER MI SALVACIÓN”.